Era el más popular de los compositores de música para el cine y parecía inagotable (compuso casi 500 bandas sonoras para películas), pero una caída derivó en unas complicaciones que acabaron con su vida, a los 91 años de edad. Su música ha acompañado algunos momentos inolvidables de la pantalla durante los últimos sesenta años. Estos son nuestros favoritos (y los vídeos para que recuerdes sus melodías).
Cinema Paradiso
Morricone compuso para esta película entrañable de Giuseppe Tornatore una banda sonora bellísima y llena de sentimiento. Si la historia del niño que crece viendo películas desde la sala de proyección del cine de su pueblo es maravillosa, la música de Morricone subraya las emociones de la pantalla con una nostalgia que solo él sabe evocar. De las películas más emotivas que pueden verse para enamorarse del cine.
Malena
El momento en que Monica Bellucci llega al pueblo y los chavales contemplan boquiabiertos desde el malecón sus andares sensuales, es uno de los más brillantes de las últimas décadas del cine. Todo ello acompañado de la música de Morricone, claro. Cada vez que Malena sale a pasear en esta historia de Tornatore ambientaba en Sicilia en la Segunda Guerra Mundial, es un espectáculo digno de ver y oír. Por esta banda sonora, Morricone fue nominado al Oscar.
El bueno, el feo y el malo
Morricone empezó a ganarse la vida haciendo arreglos musicales de otros compositores ya establecidos en el cine. Su amigo de la infancia Sergio Leone, le llamó para que fuese el compositor de la música de sus películas, que dio lugar a un género que sería conocido como el spaguetti western. Empezaron su colaboración en 1964 con Por un puñado de dólares, y en 1966 compuso la inolvidable banda sonora de El bueno, el feo y el malo.
La misión
Sin duda, una de las composiciones más emocionantes de la historia del cine, que además combina corales litúrgicas, tambores nativos y guitarras españolas, mostrando una riquísima diversidad en la misma pieza. Esta espléndida película fue dirigida en 1986 por Roland Joffé, con Robert de Niro y Jeremy Irons como protagonistas. Si hay que quedarse con un movimiento, Falls (Cascadas) es uno de los más impresionantes de toda la obra de Morricone.
Los intocables de Eliot Ness
Estrenada en 1987, la película dirigida por Brian de Palma es una de las más significativas de los años 80. La orquestación de cuerda que anuncia la llegada del grupo de Kevin Costner, Andy García y Sean Connery, es inolvidable. Un ritmo intenso, breve, y contundente, marca de la casa del mejor Morricone. La tensión harmónica que consigue Morricone en esta obra en insuperable.
Érase una vez en América
Sergio Leone rodó una de las escenas más deslumbrantes de la historia del cine, cuando Robert de Niro mira a través de un agujero de la pared a Elizabeth McGovern, y Ennio Morricone compuso una de las melodías más bellas. La banda sonora de esta película está considerada por muchos la mejor de la historia. Morricone merecía el Oscar que la academia de Hollywood no le dio, al ser descalificada por un detalle técnico (el nombre del compositor no estaba incluido en los créditos finales). Maravillosa.
Los odiosos ocho
Que su admirado Morricone compusiese la banda sonora para sus películas era uno de los sueños de Tarantino. Tras conseguir que compusiera la partitura de Django desencadenado, consiguió convencerle para que hiciese después la de Los odiosos ocho, por la que consiguió un Oscar a la mejor banda sonora original en 2016. La orquesta de cuerda y viento ideada por Morricone es el complemento perfecto para el humor negro de Tarantino.
Novecento
Obra maestra de Bernardo Bertolucci, protagonizada por Robert de Niro, Gérard Depardieu, Stefania Sandrelli, Donald Sutherland y Burt Lancaster, entre otros, que narra el complejo panorama político y social de Italia tras la unificación y los compases revolucionarios del siglo XX. El fresco histórico es monumental y la partitura de Morricone es una de las más grandiosas de su carrera. Épica y maravillosa.
La muerte tenía un precio
Segunda parte de la llamada Trilogía del dólar, de Ennio Morricone, donde repite sus acertada combinación de instrumentos y silbidos que acompañan las imágenes en Por un puñado de dólares y El bueno, el feo y el malo. En esta película se encuentra una de sus melodías más famosas, y una de las más conocidas de la historia del cine "Per qualche dollare in più".
Días del cielo
El celebrado director Terrence Malick dio lo mejor de sí en sus primeras películas: Malas tierras y Días del cielo. En la segunda, ambientada a principios del siglo XX, cuenta la aventura de una pareja interpretada por Richard Gere y Brooke Adams, que abandona la pobreza de Chicago para buscar fortuna trabajando en una granja. La melodía de Morricone, por la que fue nominado al Oscar, encaja a la perfección con el tono nostálgico y liríco de las imágenes de Malick.